En el Perú, el cumplimiento tributario es un aspecto esencial para la estabilidad y el crecimiento de cualquier negocio. Sin embargo, muchas empresas y profesionales aún subestiman la importancia de una correcta gestión fiscal, lo que puede derivar en sanciones, intereses moratorios e incluso complicaciones legales. Con un marco normativo cada vez más dinámico y una SUNAT que ha intensificado sus estrategias de fiscalización, estar al día en materia tributaria no es una opción, sino una obligación.
A propósito de esto, en consulta con la destacada abogada tributarista Haydee Injante, del estudio Enfoque Contable, sostiene que el desconocimiento o la falta de asesoría en contabilidad y tributos pueden generar riesgos innecesarios para las empresas. No solo se trata de cumplir con las declaraciones de impuestos, sino de comprender el impacto de las obligaciones fiscales en la planificación financiera. Aspectos como la adecuada aplicación del IGV, la correcta deducción de gastos o la optimización de la carga tributaria pueden marcar la diferencia entre una empresa con estabilidad y otra expuesta a contingencias.
La SUNAT y la fiscalización cada vez más estricta
En los últimos años, la SUNAT ha adoptado herramientas más sofisticadas para la fiscalización de contribuyentes. La digitalización de procesos, la interconexión con otras entidades y el cruce de información en tiempo real han hecho que los errores en las declaraciones de impuestos sean detectados con mayor facilidad. A esto se suma la implementación del Sistema de Emisión Electrónica, que obliga a muchas empresas a llevar un control más riguroso de sus operaciones y facturación.
Es importante que los contribuyentes comprendan que las omisiones y errores en la contabilidad pueden derivar en sanciones que afectan la operatividad del negocio. Además, la falta de presentación de libros electrónicos, errores en la declaración del Impuesto a la Renta o la incorrecta categorización de operaciones pueden acarrear multas que impactan la liquidez de las empresas.
La importancia de un contador y una asesoría especializada
El papel del contador en la gestión tributaria de una empresa es fundamental. No solo se encarga de cumplir con las obligaciones formales ante la SUNAT, sino que también proporciona información clave para la toma de decisiones estratégicas. En particular, un adecuado asesoramiento permite minimizar riesgos fiscales, aprovechar incentivos tributarios y garantizar que la empresa opere dentro del marco legal.
En este contexto, contar con un servicio especializado en contabilidad y tributos, como el que ofrece el estudio Enfoque Contable, es una inversión que aporta tranquilidad y previsión financiera. La asesoría de expertos permite a las empresas optimizar su carga fiscal y evitar complicaciones que puedan poner en riesgo su crecimiento.
