En las colinas de Marbella, uno de los destinos más deseados de Europa, GILMAR Real Estate presenta una villa moderna que combina diseño contemporáneo, privacidad total y una conexión inigualable con el entorno natural. Ubicada en Los Altos de los Monteros, una zona residencial tranquila y exclusiva, esta propiedad invita a vivir la auténtica vida mediterránea: luz, mar, gastronomía, golf y descanso, todo a unos minutos de casa.
Marbella, en la costa sur de España, es sinónimo de estilo de vida relajado, clima templado durante todo el año y una vibrante oferta cultural y social. La villa se encuentra a pocos minutos del centro urbano, playas de aguas cálidas, restaurantes de renombre, campos de golf y centros de salud. Su entorno, rodeado de colinas verdes y vistas abiertas al mar, ofrece una experiencia de vida difícil de igualar.
Diseñada y construida por su propio propietario con una visión muy personal, esta residencia destaca por sus líneas limpias, materiales nobles y una distribución que maximiza la entrada de luz natural. Desde el hall de acceso, un pasillo con paneles de madera lleva a una cocina moderna con ventanales de gran formato, abierta a las vistas del Mediterráneo. El comedor independiente conecta con el jardín y la piscina a través de puertas corredizas de cristal, creando un ambiente cálido y abierto.
En la planta baja se encuentra la suite principal, con baño privado y vistas al mar, además de una oficina ideal para el trabajo remoto. En la planta alta, tres dormitorios más —todos con baño en suite y acceso a terrazas— y una sala adicional que puede funcionar como despacho o dormitorio extra. Desde cualquier estancia, el paisaje es protagonista.
La planta inferior alberga un apartamento de invitados con entrada independiente, baño completo, sauna, lavandería y acceso a la despensa. Un espacio ideal para visitas prolongadas o incluso para personal de servicio.
Los detalles constructivos, como la carpintería de madera lacada, la calefacción central y los acabados en caoba, otorgan carácter y sofisticación. La piscina, rodeada de terrazas de madera, completa un conjunto pensado para disfrutar del aire libre y del inigualable clima marbellí durante todo el año.
A solo cinco minutos en auto de servicios clave como el Hospital Costa del Sol o supermercados, esta propiedad representa una oportunidad única para quienes sueñan con establecerse en Europa o invertir en una residencia en la Costa del Sol, uno de los mercados más estables y codiciados del continente.
Una villa donde la vida se saborea con calma, mirando al Mediterráneo.